domingo, 21 de agosto de 2011

Un borrador de hace unos días, no siento que esté terminado.

La salud total de los seres vivos es un estado inalcanzable. El cuerpo humano siempre se está sometiendo a desequilibrios del medio externo. Por lo que en todo momento tiene que estar generando respuestas para preservar la existencia del mismo. Dado que la vida como la conocemos es un conjunto de reacciones químicas. Para que estas reacciones se puedan dar las moléculas tienen que poseer sus estructuras menos estables. Estas estructuras hacen que esntonces la vida sea un estado de desequilibrio porque las moléculas cuando están con sus estructuras más estables no pueden realizar reacciones químicas esenciales (ej. La conducción de impulsos nerviosos motores desde mi cerebro hasta mis dedos que me permite estar escribiendo en este momento se produce por una reacción de catión sodio y el anión cloro). Aunque por más que nunca se alcance la salud completamente. Sí puedo seguir respirando y viviendo porque mi sistema inmunológico reponde frente a los estímulos del medio externo preservando mi vida.

Si nosotros los seres humanos estamos compuestos por moléculas. Y todas estas moléculas que nos constituyen exhiben el mismo comportamiento que nosotros como individuo en su conjunto, entonces puedo afirmar que las propiedades con las que acabo de describir a las moléculas se aplican a mí como persona. Decidí tomar este ejemplo porque me permite dar una clara perspectiva de lo que opino sobre la felicidad. La felicidad así como la salud es un estado inalcanzable en su absoluto. Podemos ser completamente felices por momentos efímeros en comparación con la duración de la vida. Pero aún así siempre perseguimos la felicidad. Así como nuestras moléculas persiguen el estado de salud absoluto Es la naturaleza de nuestra psiquis. Por más que en algunos momentos pensemos que no, siempre existe la capacidad de levantarse de las derrotas y salir nuevamente a la lucha. Esos momentos minúsculos de alegría valen toda una vida de búsqueda. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario